La ciberadicción, también conocida como adicción a las pantallas, se refiere a la dependencia del uso de Internet que puede llegar a interferir con la salud. Se accede a Internet a través de dispositivos que tienen en común las pantallas, como ordenadores, teléfono móvil y tabletas, de manera que coloquialmente se habla de “adicción a las pantallas”. Es un fenómeno de la era digital del que solo recientemente somos conscientes. Las nuevas tecnologías representan la posibilidad de huir del aquí y el ahora para sumergirse en un mundo de fantasía, donde aparentemente puedes hacer y ser quien quieras sin esfuerzo.

A medida que nuestras vidas se vuelven cada vez más interconectadas, identificar y prevenir esta adicción se ha convertido en una prioridad, ya que puede afectar negativamente la salud mental, emocional y física de las personas, condicionando sus relaciones personales y su vida diaria. La tecnología es un instrumento muy potente y en su uso se ha de mantener un equilibrio saludable, identificar y prevenir posibles abusos ayudarán en ese sentido.

Síntomas de la adicción a las pantallas

Se manifiesta a través de síntomas que pueden afectar a diferentes aspectos de la vida de una persona, que van desde las relaciones familiares o con amistades, hasta el aislamiento total de la sociedad o de la realidad que se está viviendo. Entre las señales que se puede reconocer, primer paso para abordar el problema y buscar soluciones adecuadas están:

  • Dispersión de la atención

La adicción a las pantallas puede llevar a una disminución significativa en la capacidad de atención. Las constantes notificaciones, mensajes y la navegación incesante pueden fragmentar la atención, dificultando actividades importantes que requieren concentración como el estudio, y reduciendo la productividad.

  • Adaptación al estímulo

El uso excesivo de la tecnología puede resultar en una adaptación al estímulo similar a la que se produce en cualquier proceso de adicción. La persona necesita cada vez más tiempo en línea para obtener el mismo nivel de satisfacción. Se pone en marcha una espiral de uso creciente, donde cada vez se requiere más tiempo para alcanzar la misma sensación de bienestar, desembocando finalmente en una adicción al medio.

  • Del mundo real al virtual

Las personas con adicción a Internet encuentran más gratificación y comodidad en sus interacciones en línea de la que obtienen en las relaciones cara a cara. El mundo virtual aparece como preferible al de la realidad física donde se encuentren. Así, es posible llegar a la paradoja de que una mayor conexión online suponga en la práctica aislamiento social y una disminución en las habilidades sociales. Estos efectos son más notorios en personas con baja autoestima, que pueden buscar la seguridad y evasión a través de redes sociales e Internet. Pueden interiorizar que su existencia es la de Internet, si no están, no existen.

  • Pérdida de la noción del tiempo

Una de las señales más claras de esta adicción es la pérdida de la noción del tiempo. Podemos pasar horas en línea sin ser conscientes de ello y, cuando la ese hábito crece, se llega a descuidar responsabilidades y compromisos cotidianos. Las personas pueden haber pasado todo el día delante de la pantalla, pero su sensación es de haber pasado solamente un par de horas.

  • Síndrome de abstinencia

Al igual que pasa con otras adicciones, la ciberadicción puede causar un síndrome de abstinencia cuando la persona no puede acceder a Internet. Esto puede manifestarse en forma de ansiedad, irritabilidad y malestar general, provocando cambios de humor y de estado de ánimo en la persona.

  • Menos horas de sueño y comidas

El uso excesivo de la tecnología puede interferir con el sueño y los hábitos alimenticios. Las personas pueden quedarse despiertas hasta tarde navegando por la web o jugando, y saltarse comidas debido a la inmersión en sus actividades en línea. Por lo tanto, estas personas dejan de dormir y de comer para pasar más tiempo frente a sus dispositivos.

  • Cambios en la conducta

El deseo de estar conectado permanentemente se convierte en lo más importante para la persona, dominando sus pensamientos, sentimientos y conductas. Empieza, a su vez, a experimentar agresividad, mal humor, aislamiento, abandono de los estudios y del entorno social, etc. Síntomas claros y de los más comunes en este tipo de adicción.

Prevención de la adicción a las pantallas

Prevenir la ciberadicción es fundamental para mantener una relación sana con la tecnología. Adoptar hábitos y estrategias que limiten el uso excesivo de Internet puede ayudarte a evitar el desarrollo de este tipo de adicciones.

  • Implementar un horario de conexión a Internet

Establecer un horario de conexión a Internet es crucial para prevenir la ciberadicción. Limitar el tiempo en línea y respetar estos límites puede ayudarte a mantener un equilibrio saludable y evitar el uso excesivo. Lo más aconsejable es ir observando el tiempo de uso de los distintos dispositivos y, en caso de que este sea elevado, ir reduciéndolo antes de que ya sea demasiado tarde y te encuentres en una situación de adicción a Internet.

  • Diversificar las actividades cotidianas

Es importante diversificar las actividades cotidianas para no depender exclusivamente de la tecnología para el entretenimiento y la interacción social. Participar en actividades físicas, hobbies y pasar tiempo con amigos y familiares puede reducir la necesidad de estar siempre en línea. Hacer actividades al aire libre o tares de casa puede favorecer a la prevención de este problema.

  • Respetar las horas de sueño y descanso

Respetar las horas de sueño y descanso es fundamental para prevenir la adicción a Internet. Desconectarse de la tecnología antes de dormir y mantener una rutina de sueño regular puede mejorar la calidad del sueño y el bienestar general. Además, siempre es aconsejable desconectar de la tecnología antes de irse a dormir o descansar, ya que, de esta manera, estas horas resultaran más reconfortantes.

Siempre hay solución

La adicción a las pantallas, o ciberadicción, es un problema real y creciente que puede tener graves consecuencias en la vida de una persona. Si te sientes identificado con alguno de los síntomas mencionados y no sabes cómo salir de esta situación, te animamos a buscar ayuda con nosotros, Amay. Contáctanos para poder ofrecerte orientación y apoyo, con la finalidad de superar la adicción a las pantallas. Pide ayuda, porque siempre hay solución. ¡Recobra el control de tu vida!